La propuesta actual se integra esencialmente bajo tres líneas conceptuales, que emanan de la voluntad política, tanto de Europa como del Ayuntamiento de Barcelona, y del mismo modo intenta sobreponerse a las potenciales regulaciones del Estado Español en contra del autoconsumo con energías renovables: la búsqueda de los edificios de consumo casi cero, la incorporación de las energías renovables en el mix energético y la autosuficiencia energética. Este último elemento es uno de los vectores políticos establecidos como prioritario por parte del Ayuntamiento de Barcelona.

Así pues, la instalación diseñada por AIGUASOL para el Castillo de Montjuic tiene como objetivo la generación in-situ con energías renovables de una gran parte de la energía que el recinto del Castillo consuma. Los vectores que se utilizarán para producir la energía serán la biomasa y la energía solar fotovoltaica. La elección de los dos vectores se ha realizado, en base a un análisis de potencial rentabilidad económica a medio-largo plazo.

Actualmente el centro satisface sus demandas de electricidad con una conexión a la red eléctrica convencional, y las de calor y frío con unas bombas de calor alimentadas con electricidad.